Yelitza Lòpez concibe el arte como una actividad que deriva de lo personal y en este sentido es catártico tanto por su poder curativo como por su capacidad de propiciar una experiencia cognitiva.
Una de las constantes en su trabajo es la mujer como símbolo de ella misma; López Laya pretende, a través del arte, dejar de ser una persona para solo ser, es por esto mismo que usa la desnudez para mostrarse tal cual es.
Otro de los elementos que desarrolla dentro de su discurso plástico es el collage, el cual realiza con objetos recolectados del paisaje donde se desenvuelve en su cotidianidad.
Se ha interesado en estudiar los sistemas de relaciones por medio de sus redes. Para explicar este fenómeno es preferible citarla "Yo no soy las millones de personas que soy sino lo que las conecta, y también soy millones de personas".
Dentro de su trabajo cerámico, una de las constantes son los juguetes sexuales, con los que busca romper los paradigmas morales de la penetración. Se interesa en lo lúdico ya que considera que el juego es la pedagogía mas efectiva.
Erika ordosgoitti
martes, 20 de noviembre de 2007
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